Hadas de la Tormenta
Hadas de la Tormenta
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Valores | |
Ataque: | 1 |
Defensa: | 8 |
Vida: | 65 |
Velocidad: | 2 tpt |
Puntos: | 33 |
Ninguna destrezas | |
Ninguna ineptitud | |
Costo de invocación | |
Esencias | 1950 |
Lascas de Cristal | 2300 |
Piedras de Poder | 320 |
Resina de Oro | 250 |
Maná | 20 |
Reavivación en: | Criadero |
Espacio: | 80 |
Revivir en chamán | |
Piedras de Poder | {{{Piedras de Podero}}} |
Hongos | {{{Hongos}}} |
Requisitos | |
Patio de Palacio: | Nivel 15 |
Fuente Bélica: | Nivel 15 |
Torre de Cristal: | Nivel 10 |
Criadero: | Nivel 5 |
Al principio apenas se percibe un susurro callado, después se escucha al viento con claridad, un aullido procedente de la eternidad, acompañado por el chillido de los pájaros que han adelantado a las hadas en su vuelo y se apresuran a anunciar la inminente tormenta que las hadas traen consigo. Por término medio las hadas de la tormenta no son más altas que cualquier niño pequeño, miden 1,20 metro; en consecuencia, no son sólo hábiles sino además tan rápidas que apenas se las ve. Siempre están de un lado para otro o escondiéndose, cosa que no les resulta difícil debido a su tamaño. Cuando hay que defender un palacio, las hadas de la tormenta son siempre las primeras en acudir para luchar en la avanzadilla. Durante el combate a menudo provocan enormes tormentas de viento huracanado que arrancan el suelo de la tierra. Si es que se puede dar crédito a las historias y canciones infantiles de pueblos y aldeas, cuentan éstas que las hadas de la tormenta les conceden tres deseos a los campesinos desamparados que se encuentran en apuros.